La primera simulación de un agujero negro fue hecha a mano.
Antes de que existieran supercomputadoras, algoritmos de inteligencia artificial o telescopios capaces de observar el horizonte de sucesos, ya se había imaginado cómo se vería un agujero negro. Y fue gracias al físico y astrofísico francés Jean-Pierre Luminet, quien en 1979 realizó la primera visualización computacional de un agujero negro, adelantándose casi 40 años a la famosa imagen captada por el Event Horizon Telescope en 2019.